lunes, 15 de febrero de 2010

príncipe de los hielos

Ama y haz lo que quieras.
Si callas, callarás con amor;
si gritas, gritarás con amor;
si corriges, corregirás con amor,
si perdonas, perdonarás con amor.

Tácito (55-115) Historiador romano


No para de nevar. Es el más crudo invierno. Más crudo que los vividos en Alemania. Miro por la ventana del salón hacía el jardín y veo caer el aguanieve incesante. Me pregunto qué tiempo hará en tu cuidad, seguro que hace mejor, está más cerca de la costa al otro lado del mar. Este invierno es el más frío de los que he vivido. No sabía lo qué es el calor hasta que dormí contigo. El sol se ha puesto en un infierno helador, congelado como nuestra comunicación.


Prinz, ¿por qué no sé nada de ti?. ¿Has muerto? No, claro que no. La que está muerta soy yo. Me mata tu ausencia. Recuerdo las noches enteras charlando, poniéndonos al día de esos veinte años separados. Yo te decía que me parecía extraño que te hablara tanto y tú me respondías que teníamos muchos años que contarnos. Tu silencio me duele tanto como mis manos desnudas dentro de la nieve. Tú quisiste que fuéramos amigos y me esforcé por ser sólo tu amiga. Cuando te confesé que te quería ya te habías ido. Nunca fui capaz de decírtelo a los ojos. Nunca te pude confesar cuando estaba entre tus brazos que te amaba desde siempre. Se lo decían mis poros a tu piel. Se lo dijeron mis gemidos a tus entrañas. Mi boca calló y mi piel habló. Los dos lo sabemos. Lo notamos, tan tonto como en el primer beso. Lo supiste, y no lo quisiste, te asustaste. Estabas demasiado dolido. Ese dolor tuyo te engrandece tanto, lo digo siempre. Sabes lo que es el amor y sabes lo que estoy pasando en tu desamor.

No quiero olvidar. Me quiero torturar con tu recuerdo. Sé porque no me hablas. No me hablas para no hacerme daño, para que te pueda olvidar. Es muy dulce por tu parte, y además considerado. Tú eres así, un buen tío. Lo sabes, te proteges y me proteges de ti. Eso lo hiciste desde el principio, me dijiste que no eras buena compañía, me dijiste que te sentías como un huérfano sin tu mujer, que necesitabas encontrarte. Es tan dulce tu voz, son tan dulces tus labios cerrados, me calman tanto. Cuando te oía, al otro lado de la linea me derretía, como la nieve que no cuaja.

Quieres quitarle trascendencia a tu vida, no quieres más compromisos. ¡No sabes cuánto te entiendo!. Eso mismo pienso yo desde hace años. Sabes que esto es distinto. Lo sabes pero no lo quieres. No puedo dejar de pensar que no tiene sentido que encuentre. Nadie puede ocupar el agujero que me ha dejado tu presencia. Supongo ese es mi destino.

Dices que todo lo emocional es efímero, que puede cambiar de un día para otro. Me retas inconscientemente a amarte para siempre. En esto no quiero darte la razón. Ni siquiera puedo, porque cada respiración me recuerda tu aliento. Esto es muy duro, demasiado. Ya sólo unas letras negras en una pantalla pueden consolar esta soledad. No me quieres querer y lo sé, pero eso no cambia que yo te quiera. Soy tan masoquista que te quiero más, porque sé que no me llamas para no hacerme sufrir más. Sé que estas ahí, esperando a que calme mi dolor. Navegas mi barco, diriges mi timón, anclas mi alma a tu corazón.

pie de foto: mi frío jardín

6 comentarios:

  1. Que extrañas formas adopta el amor, y que difícil resulta entenderlas.
    Te agarra, te arrastra, te seduce, te embruja y después, te golpea hasta partirte el alma, sin piedad.

    Aunque tu no lo quieras, te deseo una pronta recuperación

    Besos Maggie

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  2. Hola Chinaski, que bonitas tus palabras y que ciertas...ando a ciegas, sobre todo con este clima. Espero que pronto llegue la primavera y pueda dejar de escribir todas estas paranioas.

    Gracias de corazón por tus palabras

    Besos a ti

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  3. El texto me gusta en la misma proporción que duele. Cuanto más se abren las distancias más intensas quizá sean las sensaciones.

    Joder, qué asco de todo y (a veces) que bien saben algunas heridas.

    ;)

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  4. Gracias Elektra, me duele, pero espero que deje de doler algún día. El resabor de esta pena nunca me dejará.

    un beso

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  5. Maggie, Maga, con todo el cariño te lo digo, deja de compadecerte, mira para otro lado. Hay muchas cosas, muchas personas que merecen tu atención y que nos las cuentes escribiendo tan bien. Tu historia es la historia del mundo, nadie somos únicos, a todos nos han ocurrido desamores muy duros pero hay que seguir.

    Venga, tía, ¡arriba!

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  6. Solateras, eso quisiera, poder mirara a otro lado. Supongo que esto ni yo me lo esperaba. Febrero es un mes chungo, intentaré hacer lo que me dices. Hay que seguir, como tu bien dices.

    Un beso, gracias por tus palabras

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confiesa aqui o en: lamagamaggie@gmail.com

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