llaman amor
cuando quieren
decir sexo?
Groucho Marx (1890-1977) Actor estadounidense.
Hoy mi entrada va a ser bastante erótico festiva. Y es que después de todo el curro de trámites que me he pegado hoy, me merezco relajarme. No hay mejor manera que relajarse que con el sexo, tanto si es con otra persona, como con varias, o con uno mismo. A veces para relajarse sólo hace falta pensar en el sexo, una micra de segundo....y de repente todos los problemas son menos. Supongo que esa es la razón por la cual los hombres tienen fama de no padecer de histeria -de ser más relajados, más pasotas- pero a la vez de pensar más de doscientas, si, lo pongo en números, 200 veces al día en sexo, o en algo que les recuerde el sexo, o en sexo con desconocidas, con la estanquera o la enfermera.
A veces pienso, cuando hablo con el farmacéutico -que está muy bueno, pero casado- si él ese mismo momento en el que hablamos de cremas contra la celulitis, está imaginándose como se lo monta conmigo. Ese es un pensamiento que prefiero apartar de mi mente, porque sino, me estaría riendo del personal todo el día. O cachonda, que es peor. El autobusero, el chico del supermercado y hasta el mendigo a la puerta. El que trabaja en el banco, el de la cola del paro, madre mía....No, no, no, me agobia un poquito, y supongo que los hombres también se podrán controlar...¿o no?
decir sexo?
Groucho Marx (1890-1977) Actor estadounidense.
Hoy mi entrada va a ser bastante erótico festiva. Y es que después de todo el curro de trámites que me he pegado hoy, me merezco relajarme. No hay mejor manera que relajarse que con el sexo, tanto si es con otra persona, como con varias, o con uno mismo. A veces para relajarse sólo hace falta pensar en el sexo, una micra de segundo....y de repente todos los problemas son menos. Supongo que esa es la razón por la cual los hombres tienen fama de no padecer de histeria -de ser más relajados, más pasotas- pero a la vez de pensar más de doscientas, si, lo pongo en números, 200 veces al día en sexo, o en algo que les recuerde el sexo, o en sexo con desconocidas, con la estanquera o la enfermera.
A veces pienso, cuando hablo con el farmacéutico -que está muy bueno, pero casado- si él ese mismo momento en el que hablamos de cremas contra la celulitis, está imaginándose como se lo monta conmigo. Ese es un pensamiento que prefiero apartar de mi mente, porque sino, me estaría riendo del personal todo el día. O cachonda, que es peor. El autobusero, el chico del supermercado y hasta el mendigo a la puerta. El que trabaja en el banco, el de la cola del paro, madre mía....No, no, no, me agobia un poquito, y supongo que los hombres también se podrán controlar...¿o no?